¿Quién pasará el test? Ministros sectoriales enfrentan distintos escenarios de cara al inminente ajuste
Titulares de Agricultura, Medio Ambiente y Transporte podrían mantenerse en sus cargos. Una suerte distinta podrían enfrentar Minería, Energía y Ciencia, MOP y Salud.
- T+
- T-
Más allá del núcleo que conforman Hacienda, Economía y Trabajo -que, al parecer, no verían cambios-, en el gabinete destacan una serie de otras áreas clave para la marcha de la actividad productiva del país. Entre ellos, hay algunos cuyos nombres se dan por confirmados y otros que no es seguro que sigan tras el inminente ajuste de gabinete.
¿Se quedan?
Parece que su permanencia estaría asegurada. La buena acogida que ha tenido en el mundo agrícola el ministro de Agricultura, Esteban Valenzuela, sería uno de los elementos que juegan a favor del rancagüino. En las últimas semanas ha hecho noticia luego de que la cartera que dirige instruyera al Servicio Agrícola y Ganadero (SAG) suspender todas las solicitudes de subdivisiones de predios rurales en que hubiese sospechas de que el suelo no sería destinado a uso agrícola, ganadero o forestal.
Otro nombre con viento a favor es el de la ministra del Medio Ambiente, Maisa Rojas. En estos seis meses de Gobierno, impulsó una serie de proyectos, siendo su principal hito la ratificación del Acuerdo de Escazú, el primer tratado internacional y proyecto de ley en temas medioambientales del Gobierno de Gabriel Boric en obtener luz verde.
Durante su mandato, se promulgó la Ley Marco de Cambio Climático, y la cartera encabezó el Comité Interministerial de Transición Hídrica Justa, siendo la primera vez que el Ministerio del Medio Ambiente lidera la estrategia del agua. Además, la ministra estuvo a la cabeza de las reuniones de emergencia por los episodios de contaminación en Quintero y Puchuncaví, teniendo como resultado el cierre a cinco años de la fundición Ventanas.
También, al alero de la ley 21.202, destinada a proteger los humedales urbanos en Chile, la cartera de medio ambiente tiene la facultad de declarar humedales urbanos a través de dos procedimientos.
Sobre el titular de Transporte y Telecomunicaciones, Juan Carlos Muñoz, en la industria se estima que no será fácil removerlo porque emprendió una compleja tarea para inyectar nuevos recursos al sistema de transportes por hasta US$ 390 millones, en medio del alza inflacionaria que trata de golpear el ticket de buses y Metro. En la discusión de la ley, tanto en el sector como el Congreso ha pedido mayor claridad sobre su posición respecto al descongelamiento de tarifas, ya que un disparo de los cobros fue lo que gatilló en 2019 el estallido social.
En zona roja
Claudio Huepe fue la carta que más sonó para llegar al Ministerio de Energía y hoy sería uno de los posibles nombres que dejarían el Gobierno. Pero una vez en el cargo, debió enfrentar las contingencias de turno como el eventual racionamiento eléctrico y la discusión de un proyecto de ley para estabilizar las cuentas de la luz, lo que postergó -según algunos- discusiones gravitantes que esperaba el sector energético.
Si bien no ha tenido tropiezos relevantes y sorteó con éxito el riesgo de un eventual racionamiento eléctrico, fuentes comentan como puntos débiles que el ministro no tendría una agenda que refleje las grandes metas de su gestión, más allá de la Agenda de Energía 2022-2026 presentada recientemente con los principales lineamientos. A esto se sumaría una falencia comunicacional y que no tiene redes políticas relevantes.
Otra candidata a salir del gabinete es la ministra de Minería, Marcela Hernando. Ella tuvo que enfrentar una de las crisis más recordadas de la actual administración: el cierre de la fundición Ventanas de Codelco. Su problema se origina cuando aseguró a la prensa que no le informaron desde la estatal sobre la decisión, generando cuestionamientos al interior de La Moneda. Uno de los mayores focos de su gestión ha sido avanzar hacia una Empresa Nacional del Litio.
El aumento de las listas de espera a más de dos millones de personas en cirugías, consultas y atenciones bajo el sistema GES en el primer semestre de este año -lapso que incluye los primeros meses de la actual administración- y el descenso en el ritmo de vacunación contra el Covid -19 que despertó cuestionamientos a la estrategia para la actual fase de la pandemia, son algunos de los problemas han puesto en tela de juicio la gestión de la ministra de Salud María Begoña Yarza. Y a los flancos abiertos en salud pública, se suma su tardía reacción a la crisis de las isapres, la cual se profundizó el mes pasado tras el fallo de la Corte de Suprema que frenó el alza de planes, escenario que ella abordó instalando en las últimas semanas una mesa de trabajo con las aseguradoras privadas.
A las potenciales bajas se podría unir el ministro de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación (MinCiencia), Flavio Salazar, con una gestión poco visible, pero que ha estado centrada en firmas de convenios, visitas a colegios e instalaciones relacionadas con la ciencia y el lanzamiento de fondos concursables, con muy pocas apariciones en la prensa como único entrevistado.
La aprobación del ministro de Obras Públicas, Juan Carlos García, bajó 10 puntos entre marzo y septiembre, según la encuesta Criteria, ubicándose al mismo nivel que autoridades como el ministro secretario general de gobierno, Giorgio Jackson. Pues, si bien, García ha sabido mostrar una actitud dialogante con el sector privado y con aquellas empresas que han entrado en disputa con el MOP, y además ha avanzado en proyectos clave para el Gobierno, como el tren Valparaíso - Santiago, desde la industria comentan que los problemas de gestión le han pasado la cuenta.
Una de las principales críticas recae no solo en la falta de pronunciamiento respecto de la cartera de concesiones, sino también en anuncios “atractivos para el sector privado” que permitan “sacar adelante nuevas iniciativas” en materia de infraestructura. Y que se hace imprescindible en medio del complejo escenario económico del país.